Avance de la inteligencia artificial
La IA está lista para avanzar a un ritmo rápido, volviéndose más poderosa y extendiéndose al mundo físico.
En un evento celebrado en San Francisco en noviembre, le preguntaron a Sam Altman, director ejecutivo de la empresa de inteligencia artificial OpenAI, qué sorpresas depararía este campo en 2024.
Los chatbots en línea como ChatGPT de OpenAI tendrán “un avance inesperado”, respondió de inmediato Altman.
Sentado a su lado, James Manyika, un ejecutivo de Google, asintió y dijo: “Estoy de acuerdo”.
El sector de la IA este año se va a definir por una característica principal: una mejora extraordinariamente rápida de la tecnología a medida que los avances se acumulen, permitiendo a la IA generar nuevos tipos de medios, imitar el razonamiento humano de nuevas maneras y filtrarse en el mundo físico a través de un nuevo tipo de robots.
En los próximos meses, los generadores de imágenes basados en IA, como DALL-E y Midjourney, ofrecerán al instante videos e imágenes fijas. Además, se fusionarán gradualmente con chatbots como ChatGPT.
Esto significa que los chatbots irán mucho más allá del texto digital y manejarán fotos, videos, diagramas, gráficos y otros medios. Su comportamiento se parecerá cada vez más al razonamiento humano y realizarán tareas cada vez más complejas en campos como las matemáticas y la ciencia. A medida que la tecnología avance hacia los robots, también ayudará a resolver problemas más allá del mundo digital.
Muchos de estos avances ya han empezado a surgir en los principales laboratorios de investigación y en productos tecnológicos. Pero en 2024, la potencia de estos productos crecerá de manera significativa y será utilizada por mucha más gente.
“El veloz progreso de la IA continuará”, dijo David Luan, director ejecutivo de Adept, una empresa emergente de IA. “Es inevitable”.
OpenAI, Google y otras empresas tecnológicas están haciendo avanzar la IA mucho más rápido que otras tecnologías debido al modo en que se construyen los sistemas subyacentes.
La mayoría de las aplicaciones de software son creadas por ingenieros, una línea de código informático a la vez, un proceso que suele ser lento y tedioso. Las empresas están mejorando la IA más rápidamente porque la tecnología se basa en redes neuronales, sistemas matemáticos que pueden aprender habilidades analizando datos digitales. Al detectar patrones en datos como artículos de Wikipedia, libros y textos digitales extraídos de internet, una red neuronal puede aprender a generar texto por sí sola.
Este año, las empresas de tecnología planean alimentar los sistemas de IA con más datos —incluidas imágenes, sonidos y más texto— de los que las personas pueden comprender. A medida que estos sistemas aprendan las relaciones entre estos diversos tipos de datos, aprenderán a resolver problemas cada vez más complejos, preparándolos para la vida en el mundo físico.
(El mes pasado, The New York Times demandó a OpenAI y Microsoft por infracción de derechos de autor de contenido de noticias relacionado con sistemas de IA).
Nada de esto significa que la IA podrá igualar al cerebro humano en el futuro cercano. Si bien las compañías de IA y los empresarios buscan crear lo que llaman “inteligencia artificial general” —una máquina que puede hacer cualquier cosa que el cerebro humano pueda hacer— esto sigue siendo una tarea de enormes proporciones. A pesar de sus rápidos avances, la IA sigue estando en sus etapas iniciales.
A continuación, una guía de cómo va a cambiar la IA este año, empezando por los avances a más corto plazo, que conducirán a nuevos progresos en sus capacidades.